un poemario plagado de lugares comunes y de un vocabulario tan rebuscado que habla de un alto ego. Algo tan comùn y ordinario en estos tiempos. La historia màs tràgica argentina, pretende disfrazarse en metàforas romànticas pero no lo logra, al contrario, es tan obvia y tan trillada la politizaciòn y el manifiesto, que disgusta al lector inteligente. de todos modos, vale el intento.
Creo que para hacer buena poesìa, de esa que nutre el alma de belleza... hay que poner menos intelectualidad y màs pasiòn. saludos
4 comentarios:
Patricia, creo que es un poemario espléndido: apelación sostenida con vigor; bello y punzante en el difícil terreno del "tú" poético.
Pero ya sabes, esto es poesía, y su paráfrasis siempre es penosa.
Saludos
P.
un poemario plagado de lugares comunes y de un vocabulario tan rebuscado que habla de un alto ego. Algo tan comùn y ordinario en estos tiempos.
La historia màs tràgica argentina, pretende disfrazarse en metàforas romànticas pero no lo logra, al contrario, es tan obvia y tan trillada la politizaciòn y el manifiesto, que disgusta al lector inteligente.
de todos modos, vale el intento.
Creo que para hacer buena poesìa, de esa que nutre el alma de belleza... hay que poner menos intelectualidad y màs pasiòn.
saludos
Señora Marta Mena (o acólito), una vez más la pifió, esta vez en relación a los referentes.
Lamento que en su cabeza de milica/o trasnochada7o haya desaprobado la materia "Tiro al blanco móvil".
Por cierto, tenga en cuenta que le hice el favor, porque jamás respondo (ni dejo los comentarios) de Anónimos.
Siga arrinconando y buscando nutricionistas para su alma.
Yo, paso.
Poesía desnuda, palabras talladas como piedras preciosas, este libro es un pequeño arcón que guarda un gran tesoro.
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